Cerca de dos años después de levantar las restrictivas medidas anticovid, la segunda economía mundial no acaba de levantar el vuelo a pesar de los pasos dados por las autoridades para relanzar la actividad.
La recuperación pospandémica fue más breve y menos robusta de lo esperado, lastrada por una crisis inmobiliaria, el débil consumo y el alto desempleo, especialmente entre los jóvenes.
Para intentar revertir esta situación y alcanzar el objetivo del 5% de crecimiento fijado por las autoridades para este año, considerado optimista por los analistas, el banco central presentó este martes una serie de medidas de estímulo.
China "reducirá la ratio de reserva mínima obligatoria y el tipo de interés básico" para las entidades bancarias y "recortará la tasa de interés de referencia en el mercado", dijo su gobernador, Pan Gongsheng, en una rueda de prensa en Beijing, quien afirmó:
El requisito de ratio de reserva se reducirá en 0,5 puntos porcentuales próximamente para aportar liquidez a largo plazo al mercado financiero de un billón de yuanes (más de 140.000 millones de dólares)
Las autoridades también "reducirán las tasas de interés de los préstamos hipotecarios existentes y unificarán la ratio de pago inicial para los préstamos hipotecarios", agregó.
Esto "llevará a los bancos comerciales a reducir las tasas de interés de múltiples préstamos hipotecarios existentes para acercarlos a los tipos de interés de los nuevos préstamos", argumentó.
Según el gobernador, esta decisión "beneficiará a 50 millones de hogares y 150 millones de personas, reduciendo la factura media anual de intereses para los hogares en unos 150.000 millones de yuanes", más de 21.000 millones de dólares.
"Ayuda a promover la expansión del consumo y la inversión", aseguró.